¿Sorprendido? En 1970 una expedición dirigida por Jacques Yves Cousteau reportó ejemplares de hasta 50 cm de largo y 1 kg de peso, de ahí el nombre de rana gigante.
Su principal característica es su piel, que es suave y holgada en pliegues que cuelgan, estos pliegues son de mucha importancia ya que la rana gigante respira a través de la piel (respiración cutánea). Los pliegues de la piel le permiten aumentar la absorción de oxígeno, esto es fundamental debido a que el contenido de oxígeno en el Lago Titicaca es bajo, y además sus pulmones están poco desarrollados.
Pese a su gran tamaño son buenos nadadores, aunque los ejemplares adultos prefieren andar por el lecho del agua buscando alimento. De día se encuentran moviéndose lentamente en el fondo lodoso del lago, o permanecen ocultas y vigilantes entre las plantas acuáticas para capturar alguna presa.
La rana gigante del Titicaca prefiere alimentarse de moluscos, crustáceos, gusanos y larvas de insectos acuáticos, también incluye en su dieta algas grandes y en algunas ocasiones puede comer peces pequeños típicos del lago.
La rana gigante del Titicaca presenta reproducción ovípara por fecundación externa, es decir, la hembra expulsa los huevos en el agua y el macho los fecunda, para finalmente ser fijados a los tallos de la totora y continuar con su desarrollo hasta la
Actualmente categorizada en el “Apéndice I” por la CITES y en “Peligro Crítico” por Unión Mundial para la Conservación de la Naturaleza (UICN). En el Perú también es considerada como En Peligro Crítico (CR) en base al DS N°004-2014-MINAGRI, debido a que enfrenta diversas amenazas como: La contaminación del lago, la colecta ilegal para la preparación de extractos con fines medicinales, la presencia de especies exóticas invasoras (trucha y pejerrey), entre las principales.